Ayer, en un incidente nada claro, el congresista Fredy Otárola protagonizó una pelea con un taxista debido a que los vehículos que ambos manejaban chocaron aparatosamente. El hecho ocurrió en las inmediaciones de la Av. Habich en el populoso distrito de San Martín de Porres. 

Aunque hasta el momento solo se sabe que ambos pelearon y que Otárola terminó con el tabique roto, un grupo de médicos está asombrado porque, luego de la gresca, el ex presidente del Congreso y ex ministro de Trabajo “por fin está hablando coherencias”.

“Cuando llegó el congresista, lo queríamos derivar a una veterinaria, pero cuando empezó a articular oraciones completas y coherencias, cosa rara en él, decidimos atenderlo porque sospechamos que luego del golpe, algo se acomodó en su cerebro y nuestra curiosidad científica pudo más”, dijo Clemencio Panduro, neurólogo del Cayetano Heredia.

“Nos trató con modales, hasta nos sugirió una radiografía preventiva y él mismo quería saturarse la herida, pero le dijimos que era nuestro trabajo. Luego dijo que presentaría un proyecto de ley en favor de los médicos y aceptó que la Ley Pulpín era una estupidez, con lo que confirmó finalmente que el golpe le estaba dando atisbos de genialidad”, dijo Martha Angulo, una veterinaria del Ejército.

Hasta el momento, se desconoce si el congresista enjuiciará al taxista, sin embargo se supo que apenas dejó la clínica, se fue a una librería para comprar algunos libros que no había leído en su vida, como el diccionario, el libro Coquito y la enciclopedia Escuela Nueva. Cabe destacar que la familia lo quiere como era antes y ha propuesto golpearlo nuevamente. Seguiremos informando.

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